No hay historia que no pueda comenzar con un "Érase una vez..." y discurrir por los procelosos cauces de un cuento, sea cual sea la tonalidad dominante adoptada por su espíritu.
Érase una vez una ventana abierta a mundos de infinitas posibilidades llamada CINE y un niño cuyo desbocado imaginario íntimo encontró en ella la dimensión justa de sus sueños.
Érase una vez un puzzle de ficciones que, corriendo en paralelo a la vida corriente de un adolescente inusual, entretejía sobre níveas pantallas de cine un juego de múltiples espejos donde realidad, charadas y fantasías se veían reflejadas.
Érase una vez la humana necesidad de desdoblarse en otros y de vivir más allá del "yo" que nos circunda y del "él" con el que los demás nos aprisionan, y un hombre descreído de casi todo pero con fe en la mágica luz que aguarda más allá de los amplios ventanales de ese arte denominado séptimo.
Érase una vez....WONDERLAND CINEMA
Érase una vez una ventana abierta a mundos de infinitas posibilidades llamada CINE y un niño cuyo desbocado imaginario íntimo encontró en ella la dimensión justa de sus sueños.
Érase una vez un puzzle de ficciones que, corriendo en paralelo a la vida corriente de un adolescente inusual, entretejía sobre níveas pantallas de cine un juego de múltiples espejos donde realidad, charadas y fantasías se veían reflejadas.
Érase una vez la humana necesidad de desdoblarse en otros y de vivir más allá del "yo" que nos circunda y del "él" con el que los demás nos aprisionan, y un hombre descreído de casi todo pero con fe en la mágica luz que aguarda más allá de los amplios ventanales de ese arte denominado séptimo.
Érase una vez....WONDERLAND CINEMA
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